El descenso del Sella con perros y mascotas
El descenso del Sella con perro es una actividad muy recomendable para las mascotas y sus dueños a bordo de una canoa bajando por el río Sella, el más emblemático del Principado de Asturias. Ven con Sellastur y vive una jornada llena de aventuras y diversión con total seguridad. ¡Te esperamos!
Diviértete bajando el Sella con tu perro
A pesar de lo que pueda parecer el descenso del Sella es una experiencia que le encanta a los perros. Son muchas las personas que vienen con sus mascotas a nuestras instalaciones y una vez finalizado el recorrido nos dicen lo bien que se lo han pasado sus animales domésticos, y sí, generalizamos porque por aquí también han pasado otro tipo de animales como gatos.
¿Y qué suele hacer nuestro perro durante la excursión? Dependiendo del tipo de perro, los que están acostumbrados al agua nadará y chapoteará en cuanto pueda, el resto disfrutarán del paisaje y la naturaleza que veremos durante nuestro viaje desde Arriondas hasta Toraño o Fríes, dependiendo de si hacemos el trayecto corto o largo.
Información y consejos para un descenso en canoa con tu perro sin problemas
En este apartado os vamos a dar toda la información para bajar el Sella en 2024 con perro además de algunas consideraciones y recomendaciones para que todo salga a pedir de boca.
Lo primero que tenéis que saber es que las mascotas bajan gratis y tienen acceso completo a nuestras instalaciones. Mientras estén en nuestras instalaciones o durante el transporte, pedimos que los perros vayan acompañados por sus amos y atados por cortesía hacia otros clientes que pueden sentir miedo o incomodidad. Aunque confiamos en su buen comportamiento, algunas personas pueden no sentirse a gusto cerca de ellos.
Disponemos de chalecos especiales para perros, es decisión del propietario ponérselo. Hay algunos que se lo ponen y otros que no, en cualquier caso tenéis disponibilidad.
También disponemos de transportines para perros para ser utilizados en los desplazamientos.
En la rampa de salida, que os recordamos que salir desde ella es opcional, algunos perros se ponen nerviosos, nuestro personal, si ve que un perro se pone nervioso os recomendarán que salgáis a pie de río.
Aconsejamos llevar únicamente un perro por canoa, o máximo dos si son de tamaño reducido. Esto se debe al espacio limitado y para garantizar una remada cómoda y efectiva para avanzar y maniobrar.
En las piraguas de dos plazas, es posible acomodar a perros de mayor tamaño en el espacio central destinado para equipaje o entre los pies del remero en la parte trasera.
Para perros de menor tamaño, suelen ubicarse cómodamente entre las piernas de los ocupantes.
Para quienes naveguen solos, no recomendamos llevar perros grandes en embarcaciones individuales. En estos casos, es mejor optar por una piragua doble y colocar al perro en el asiento delantero.
En cuanto a los perros pequeños, pueden viajar sin problemas entre las piernas en una piragua individual.
Durante la navegación, es crucial que los perros no estén amarrados a la embarcación. En caso de volcar, tener al perro atado puede complicar el rescate y representar un riesgo grave tanto para el animal como para el remero. Por ende, los perros deben ir libres dentro de la barca y cualquier cuerda o correa debe estar debidamente guardada.
Al inicio, es posible que el perro se muestre nervioso. Lo ideal es sujetarlo suavemente con las manos o el cuerpo hasta que se habitúe al entorno y se serene, momento en el cual pueden comenzar a remar y disfrutar del río.
Recuerden que el Río Sella es un Espacio Natural Protegido, hogar de diversa flora y fauna que merece nuestro respeto. Por ello, durante las paradas, es importante mantener al perro bajo control y atado si es necesario, especialmente si hay aves u otros animales cerca.
Cuando se trata de llevar a tu perro al agua, la raza importa
Es bien sabido que muchos perros son nadadores natos, sintiéndose más a gusto y libres sin necesidad de usar chalecos salvavidas. Existen razas que tienen un instinto natural para nadar e incluso algunas que sobresalen buceando. Entre las razas que más disfrutan del agua, destacan:
El Terranova: oriundo de Canadá, este perro de gran tamaño es conocido por su rol en rescates marítimos.
El Golden Retriever: cazador nato en zonas húmedas, tiene una habilidad innata para nadar y a veces su fascinación por el agua puede parecer excesiva.
El Labrador Retriever: comparte el amor por el agua con el Golden, disfrutando enormemente de la natación.
El Perro de Aguas (español o portugués): razas que se sienten en su elemento en el agua.
El Caniche: también se cuenta entre los amantes del agua.
Aunque es cierto que la mayoría de los perros tienen el instinto de «patalear» para no hundirse, no todos tienen la misma facilidad para nadar. Hay razas específicamente adaptadas para la natación, otras que pueden aprender y algunas que, debido a su físico, podrían tener dificultades e incluso correr riesgo de ahogarse.
Generalmente, los perros pequeños o aquellos con patas cortas tienen más problemas para nadar. Si a esto le sumamos características físicas que dificultan la respiración o la resistencia al esfuerzo, nos encontramos con perros que no están hechos para nadar.
Por eso, razas con estas particularidades deberían usar un chaleco salvavidas, disponible para alquiler en nuestras instalaciones, o quizás es mejor omitir la actividad si parece que no la disfrutarán, optando por nuestro servicio de guardería mientras tú participas en la aventura.
El Bulldog, por ejemplo, tiene una estructura corpulenta y, a pesar de su fuerza, no posee la agilidad necesaria para mantenerse a flote, haciendo de la natación un reto.
El Bulldog Francés, aficionado al agua, enfrenta desafíos similares a su contraparte inglesa, sumado a problemas respiratorios que complican aún más la situación.
El Dachshund o Perro Salchicha lucha debido a la longitud de sus patas, que le dificulta nadar más que a otras razas con patas más largas.
El Corgi, pese a su diferencia de familia, comparte el dilema de patas cortas con los Dachshunds y su forma corpulenta agrega un desafío extra en el agua.
El Basset Hound, con su cabeza grande, orejas largas, cuerpo robusto y patas cortas, tiene todos los elementos que le dificultan la natación por su inestable centro de gravedad.
El Bull Terrier, a pesar de estar en buena forma física, tiene la desventaja de una cabeza pesada, que le dificulta mantener el cuello firme al nadar.
El Pekinés, tranquilo y hogareño, además de sus patas cortas, tiene un pelaje largo que le impide moverse libremente en el agua.
El Shih Tzu y el Maltés enfrentan problemas similares al Pekinés, y su nerviosismo puede llevarlos a pánico o frío en el agua.
El Terrier Escocés, aunque amante del agua, se ve limitado por su pelaje denso y pesado.
El Pug, generalmente desinteresado en el agua, no está hecho para nadar largas distancias o en aguas profundas.
El Chow Chow, con su abundante pelaje, se ve aún más limitado cuando está mojado, aumentando el riesgo de ahogamiento.
Otras razas como lebreles o con mucho pelo, como los Galgos, Afganos o Bobtails, también encuentran dificultades para nadar, aunque su resistencia física es mayor.
En la descripción general de la actividad de Descenso del Sella, encontrarás detalles completos sobre el evento (punto de partida, duración, qué está incluido, y más). Si te surge alguna pregunta, no dudes en comunicarte con nosotros; estaremos encantados de aclarar tus dudas.